Roadtrip por la Costa Oeste de EEUU en 14 días
Hoy quiero escribir sobre el que ha sido uno de los viajes más impresionantes que probablemente realice en mi vida. Han sido 14 días, 4000 Km, 7 Parques Nacionales y no nacionales, miles de fotos, montones de anécdotas y recuerdos que jamás olvidaremos. Estoy hablando del roadtrip por la Costa Oeste de Estados Unidos que realizamos hace sólo unos meses, en diciembre de 2017.
A veces la vida te da oportunidades, y nosotros no somos de los que le dicen que no cuando se nos presentan. Así que cuando Edu se tuvo que ir unos meses a San Diego, en California, por motivos de trabajo, decidimos aprovechar para hacer un viaje que siempre habíamos soñado.
Conseguí cuadrar un par de semanas de vacaciones en diciembre, y compré unos billetes de avión Madrid-San Diego/Los Ángeles-Madrid. Estaba hecho. Me iba a California.
Planificando la ruta
Cuando intentas organizar un viaje de estas características, descubres que internet está inundado de información de todo tipo. Dado que el tiempo, como siempre, era limitado (ya nos gustaría disponer de varios meses para viajar…), teníamos que priorizar. Decidimos que preferíamos dedicarle tiempo a los Parques Nacionales respecto a las ciudades. No somos muy urbanitas, y lo que nos hacía soñar de Estados Unidos eran los paisajes impresionantes que estábamos hartos de ver en fotos.
Saldríamos de San Diego y la idea era llegar hasta San Francisco y posteriormente bajar hasta Los Ángeles, ya que Edu tenía su billete de vuelta desde allí. Cuando ya estábamos en el meollo del asunto, descubrimos que una de las principales carreteras que aparecían en todos los blogs para ir desde Las Vegas hasta Yosemite, Tioga Pass, estaría cerrada al ser invierno. Tocó rediseñar el camino teniendo en cuenta esta limitación.
Además, debido a un derrumbamiento, la carretera del Big Sur estaba cortada. Seguí de cerca los avances en las obras hasta poco antes de nuestro viaje. Por suerte, repararon uno de los puentes y pudimos hacer la mitad norte, tomando un desvío hasta la autopista del interior.
Para que no te pase como a nosotros y tengas toda la información a mano, te dejo esta entrada: Lo que necesitas saber antes de planificar un viaje a la Costa Oeste de EEUU.
Para que no te pase como a nosotros y tengas toda la información a mano, te dejo esta entrada: Lo que necesitas saber antes de planificar un viaje a la Costa Oeste de EEUU.
La ruta definitiva
Tras todas estas idas y venidas en nuestro planning, finalmente nuestro roadtrip fue así:
- Día 1. Vuelo Madrid-Londres-San Diego.
- Día 2. San Diego: Old Town y Downtown.
- Día 3. San Diego: playas.
- Día 4. San Diego-Kingman. Calico. Desierto de Mojave.
- Día 5. Kingman-Page. Ruta 66. Gran Cañón.
- Día 6. Page-Las Vegas. Horseshoe Bend. Antelope Canyon. Lago Powell.
- Día 6.2. Las Vegas.
- Día 7. Las Vegas-Three Rivers. Death Valley.
- Día 8. Three Rivers-El Portal. Sequoia National Park.
- Día 9. El Portal-San Francisco. Yosemite.
- Día 10. San Francisco.
- Día 11. San Francisco-Buellton. Big Sur.
- Día 12. Buellton-Los Ángeles. Universal Studios.
- Días 13 y 14. Los Ángeles: Hollywood, Santa Mónica, Venice. Vuelo Los Ángeles-Londres-Madrid.
Os dejo un breve resumen de lo que fue el viaje, aunque habrá entradas por días, y muchas fotos:
Este día salí sola a descubrir San Diego: visité el Old Town, la zona más antigua, con un espíritu muy mexicano, y posteriormente paseé por Gaslamp Quarter, el epicentro del Downtown. Así llegué hasta el Embarcadero, que es una de las zonas imprescindibles de esta ciudad.
De nuevo acompañada únicamente por mi cámara, cogí un bus camino de Pacific Beach, una playa de arena blanca con alma surfera. Seguí hasta La Jolla Coves, con acantilados poblados por cormoranes, pelícanos y una colonia inmensa de leones marinos. Me encantó. Por la tarde íbamos a ir a la Isla de Coronado, pero de nuevo los viajes se guardan sus sorpresas… Acabamos el día viendo un atardecer increíble en La Jolla Shores.
Comenzamos el roadtrip en un día que sería principalmente de coche, aunque aprovechamos para hacer una parada en Calico, un antiguo pueblo minero abandonado que actualmente han restaurado para que se pueda visitar. El desierto de Mojave fue nuestro primer contacto con las carreteras infinitas estadounidenses, y en él pudimos disfrutar de una puesta de sol coloreando dunas gigantescas…
Tras dormir en un alojamiento súper auténtico de la Ruta 66, El Trovatore Motel, quisimos recorrer el tramo entre Kingman y Williams, pasando por la gasolinera más famosa, ahora tienda, Hackleberry General Store, y el encantador pueblecito de Seligman. Una mañana de lo más entretenida antes de llegar a la primera de las maravillas naturales que nos esperaban en el viaje: el imponente Gran Cañón. Recorrimos los miradores siguiendo la ruta de Desert View, y nos dirigimos finalmente hasta Page.
La mañana que pasamos en Page cumplí el sueño de ir a Antelope Canyon, un increíble desfiladero en el que la luz del sol entra dejando colores espectaculares. Previamente visitamos Horseshoe Bend, el meandro más famoso del río Colorado. Y, tras disfrutar de unas increíbles vistas del Lago Powell, de nuevo carretera rumbo a Las Vegas.
Allí visitamos algunos de los casinos más famosos: The Venetian, Bellagio y Paris, sorprendiéndonos a cada paso que dábamos. Dormimos en el casino New York New York, tomándonos antes unos perritos calientes en Grand Park Avenue (sí, lo que leéis…).
Fue el día más duro en cuanto a coche se refiere, y no por las increíbles rectas de Death Valley, cuyo paisaje nos cautivó, sino porque, gracias a una bromita de Google Maps, dimos un rodeo de casi dos horas… Eso sí, previamente visitamos paisajes completamente marcianos, ¡y vivimos uno de los momentos más especiales del viaje cuando encontramos una familia de coyotes!
Día 8. Three Rivers-El Portal. Sequoia National Park.
Comenzamos el día en el Parque Nacional de las Secuoyas con la sorpresa de encontrarnos abierta la carretera a Tunnel Tree y Moro Rock, por lo que subimos a la famosa roca y disfrutamos de unas vistas increíbles del valle. Después hicimos un trekking entre secuoyas, que nos recibieron con un manto de nieve de la noche anterior, y nos despedimos visitando al General Sherman, la secuoya más voluminosa que existe.
Día 9. El Portal-San Francisco. Yosemite.
Invertimos este día en el Valle de Yosemite. Decidimos hace un par de rutas para hacernos una idea general, paseando entre los meadows observando ciervos y cascadas. Finalizamos el día haciendo un pequeño trail hasta Mirror Lake, donde se pueden ver los reflejos más famosos de Yosemite.
Día 10. San Francisco.
Ni siquiera en San Francisco nos libramos del coche, ya que comenzamos la mañana cruzando el famoso Golden Gate para ir a algunos de los miradores. Después fuimos hasta Baker Beach, y tampoco nos perdimos las increíbles vistas desde Twin Peaks. Tras visitar The Painted Ladies, por fin aparcamos en nuestro alojamiento y paseamos por Little Italy hasta llegar al famoso Pier 39, donde vimos los leones marinos y disfrutamos del ambiente navideño.
Día 11. San Francisco-Buellton. Big Sur.
Tras una visita a Googleplex, la sede de Google, nos fuimos hasta Carmel By The Sea, un precioso pueblecito costero con alguna que otra curiosidad, desde el que comienza el famoso Big Sur. Recorrimos los impresionantes acantilados, descubrimos la preciosa cascada en la playa de McWay… Un auténtico paraíso tropical en la costa californiana. Tras tomar el desvío que nos permitía incorporarnos a la autopista, debido al derrumbamiento, llegamos finalmente a Buellton, el pequeño pueblo en el que haríamos noche.
Día 12. Buellton-Los Ángeles. Universal Studios.
Nos despertamos con una sorpresa bastante desagradable… Tras hacer de tripas corazón, tomamos la carretera rumbo a Los Ángeles, y pasamos uno de los días más divertidos de mi vida en Universal Studios. Hay que aclarar que soy muy fan de Harry Potter, y que no hace demasiado que han abierto un área completa dedicada a él similar a la de Orlando.
Días 13 y 14. Los Ángeles: Hollywood, Santa Mónica, Venice. Vuelo Los Ángeles-Londres-Madrid.
La última mañana nos fuimos hasta Hollywood y conocimos el Paseo de la Fama. Tras buscar las estrellas que más nos interesaban, llegamos al muelle de Santa Mónica, disfrutando de su ambiente. Caminando llegamos hasta Venice y su ambiente bohemio y, ya sí, nos tocó decirle adiós a este viaje y coger el avión de vuelta a casa…
Y ahora que estamos en casa…
Puedo decir que sí, ha sido un viaje de los que se recuerdan toda la vida. Si te dan miedo las horas de coche, te diré que a nosotros no se nos hicieron nada pesadas. Lo compensaban las vistas que teníamos cada vez que mirábamos por la ventanilla.
Sin embargo, somos conscientes de que hemos dejado muchos Parques increíbles por ver. Yo no me muero sin ver Yellowstone… Pero eso será otro viaje.
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